Hoy, día 6 de noviembre de 2012, comienza el montaje de los andamios para proceder a la restauración de las pinturas del muro norte de la Iglesia de Santa María de Nogueira.
Pero el trabajo de restauración no comienza aquí, comenzó hace dos meses con la preparación de los estudios previos: examen organoléptico, documentación gráfica, mediciones termohigrométricas, analíticas así como la realización de catas en el encalado del muro. En sucesivos post explicamos una a una la importancia de cada uno de estos estudios.
Examen organoléptico: Es el primer estudio que se realiza siempre, mediante la observación directa y ayudados de diferentes técnicas lumínicas que sirven para poner de manifiesto y recoger datos del estado de conservación y caracterización de los materiales constituyentes de la obra.
Macrofotografía, fotografía en blanco y negro, fotografía de luz rasante y análisis de la obra con luz ultravioleta han permitido conocer al detalle las pinturas y realizar mapas de alteraciones y localización de elementos anexos a la pintura mural.
La documentación gráfica: Es de vital importancia dentro de cualquier trabajo de restauración, por pequeño que sea, contar con una exhaustiva documentación gráfica desde antes de iniciar la obra. No sólo sirve como testigo de un proceso de restauración, para ver el antes y el después, sino también para conseguir la máxima cantidad de información posible de la obra antes de ser tratada. Las fotografías realizadas se complementan con planimetrías en las que se detallan medidas, alteraciones, materiales y todos aquellos detalles que se puedan considerar importante reflejar.
Mediciones termohigrométricas: El conocimiento de los ciclos de temperatura y humedad es imprescindible antes, durante y después de la restauración. Al principio de la obra se deben conocer los ciclos de humedad y sequedad para elegir correctamente los materiales y tipos de tratamientos a llevar a cabo. Durante la restauración tanto la humedad como la temperatura son determinantes en la evolución de cada proceso. Una vez terminada la obra, deben buscarse unos niveles termohigrométricos adecuados a fin de alcanzar las condiciones óptimas de conservación para la pintura y para los materiales de restauración empleados. Se deben controlar los niveles para evitar fluctuaciones bruscas que pongan en riesgo la estabilidad del conjunto.
Analíticas: Las analíticas deben proporcionar la información necesaria para conocer al detalle los materiales y la técnica de ejecución, así como las posibles alteraciones presentes en la pintura. Las muestras a tomar deben ser lo más representativas posible pero dañando lo menos posible la obra. Hoy en día existen nuevas técnicas no destructivas al alcance de los restauradores, tales como la espectrometría de fluorescencia de rayos X (FRX), que permite un análisis rápido y preciso de los elementos químicos sin dañar en modo alguno la superficie de la pintura. CREA S.C. ha colaborado con Lucía Pereira Pardo del GEMAP de la Universidad de Santiago Compostela para la realización de un estudio con esta técnica.
Las catas: La realización de catas en una pintura mural de estas características nos ayuda a comprender la evolución de la obra a lo largo del tiempo. En este caso realizamos catas para poder determinar el número y grosor de las capas de cal que cubrían a la pintura, la superficie que abarcaba el mural original y su estado de conservación general.
El desencalado es uno de los procesos más llamativos en la restauración de pintura mural, ya que al fin y al cabo esta pintura no ha podido verse en su totalidad en más de 200 años. En el siguiente vídeo podrán ver un ejemplo del desencalado en Nogueira de Miño donde se descubre el rostro de San Pedro.
Durante esta fase de intervención nos ha sorprendido el excelente estado de conservación que presenta y lo completa que está la pintura, pese a las sucesivas remodelaciones y recubrimientos que ha sufrido a lo largo de su historia.
Para el desencalado se emplean pequeños cinceles de precisión y bisturís para ir quitando los restos del cal. Es un proceso muy delicado y lento en el que hay que tener en cuenta la solidez del mortero y estado de conservación de la capa pictórica antes de proceder a la retirada de la capa de cal.
Hemos acabado de retirar todas las capas de cal que cubrían la pintura. Mostramos una foto general del muro donde puede apreciarse la calidad de la obra y la intensidad de los colores que perduran a pesar del paso del tiempo.
En la siguiente foto se puede apreciar una eliminación de cales más minuciosa, previa a la limpieza de la pintura:
Al remate de la fase de desencalado se procedió al relleno de oquedades entre el mortero y la piedra del muro.
Para realizar este tratamiento se inyectó, previa aplicación de humectante, mortero mineral líquido a través de pequeños orificios ya existentes. Durante su secado, fue necesaria la estabilización de cada zona con mini puntales de refuerzo.
Queremos mostrar en esta entrada la documentación fotográfica obtenida durante el proceso de limpieza del mural.
Fotografía comparativa antes y después de la limpieza:
Os mostramos en estos vídeos el proceso de limpieza una vez desencalado el mural.
Para poder integrar cromáticamente las zonas de mortero nuevo se utilizó la técnica del rigattino, consistente en aplicar líneas de colores muy delgadas y muy próximas entre sí proporcionando una vibración de tono apreciable a poca distancia, pero invisible desde el punto de vista normal del observador.
Tras meses de trabajo en Santa María de Nogueira (Chantada, Lugo), hoy os mostramos el resultado final de la restauración del mural.